(Hist. Med.) En la historia de la Corona de Aragón se denomina así al período comprendido entre la muerte del rey Martín el Humano, en mayo de 1410, y la elevación al trono de , tras la elección de su persona en el Compromiso de Caspe de junio de 1412. Durante este tiempo -casi dos años en que Aragón estuvo huérfano de autoridad suprema, el reino se vio alterado profundamente en su paz social por todo tipo de desmanes y asaltos contra la propiedad privada y pública, a pesar de los intentos de las autoridades aragonesas por mantener el orden y restablecer la ley. El asesinato del arzobispo de Zaragoza, García Fernández de Heredia, cuando regresaba del Parlamento de Calatayud a primeros de junio de 1411, a manos de los seguidores del conde de Urgel -uno de los más fuertes candidatos al trono vacante, junto con el infante castellano don Fernando de Trastámara-, representa un ejemplo significativo de la impunidad con que se cometían ciertos crímenes y del estado de anarquía que predominó en el territorio aragonés durante este tiempo; a lo que contribuyó en gran medida la presencia de tropas castellanas, francesas e inglesas que penetraron en Aragón para apoyar las aspiraciones de algunos de los candidatos al trono. Para solucionar el vacío de poder y autoridad en la Corona se iniciarían gestiones desde el primer momento de la desaparición del rey Martín y hasta finales del año 1410, sin que se llegara a ningún acuerdo positivo con vistas a la preparación de un parlamento general. Fue en febrero de 1411 cuando, superando las dificultades surgidas en Cataluña y Valencia, se pudo concertar al fin una reunión previa en Calatayud, con representación catalana y presencia de embajadores de los diversos candidatos al trono. Las conversaciones en esta ciudad aragonesa duraron hasta finales de marzo, reforzándose la autoridad del gobernador y del Justicia de Aragón para mantener el orden y la legalidad.
Del Parlamento de Calatayud saldría una comisión aragonesa que en mayo de ese mismo año de 1411 negociaría con catalanes y valencianos la posibilidad de reunir en Alcañiz otro parlamento que se comprometiera a no clausurarse sin una solución definitiva. Parlamento en el que los aragoneses tomarían decididamente la iniciativa, adoptada ya en Calatayud frente a catalanes y valencianos (más indecisos y divididos) y en contra de la asamblea paralela reunida por entonces en Mequinenza -Parlamento de Mequinenza - por parte de algunos nobles disconformes con las negociaciones llevadas a cabo por las tres personalidades aragonesas que habían asumido la responsabilidad del momento: el gobernador Gil Ruiz de Lihori, el Justicia Juan Ximénez Cerdán y el eminente jurista zaragozano Berenguer de Bardaxí.
El Parlamento de Alcañiz supuso ya un gran avance en el trámite de la sucesión, gracias al arbitraje de los aragoneses, empeñados en llegar a un acuerdo viable y satisfactorio para los tres Estados principales de la Corona; destacan la inspiración y colaboración de don Pedro de Luna -Benedicto XIII- a través de la presencia en Alcañiz de su enviado Francisco de Aranda, que sería después uno de los compromisarios en Caspe.
La firma de la Concordia de Alcañiz el 1511-1412, que recogía en 28 capítulos el procedimiento que seguir en la negociación posterior, sentaría las bases del Compromiso de Caspe
; disputáronse catorce representantes aragoneses que, junto con los elegidos por Cataluña -y en ausencia de los valencianos, divididos a la sazón en dos parlamentos simultáneos-, decidirían sobre el particular. Recayó finalmente la elección en tres representantes por cada uno de los estados de Aragón, Valencia y Cataluña elegidos por iniciativa aragonesa, y con la complacencia y aprobación de Benedicto XIII, quienes se reunirían en Caspe para poner punto final a la cuestión, designando el candidato más adecuado para ocupar el trono aragonés en junio de 1412.
• Bibliog.: (Ver bibliografía en Compromiso de Caspe .) Dualde Serrano, M.: «Alcañiz durante el Compromiso de Caspe»; Teruel, 4, 1950, pp. 1-137. Sarasa Sánchez, E.: Aragón y el Compromiso de Caspe; Zaragoza, 1981. Yagüe Ferrer, M.ª I.: «Una extensa historia para un breve reinado: Gesta Ferdinandi regis Aragonum del humanista italiano Lorenzo Valla»; Homenaje al profesor D. Antonio Ubieto Arteta, Zaragoza, 1989, pp. 697-716.
Preferencias de Privacidad · Política de privacidad y cookies
© DiCom Medios SL. C/ Hernán Cortés 37, Zaragoza · 976700010